Por Marcos Corsetti, Médico Veterinario.- De acuerdo a la experiencia de la erupción anterior, de bastantes necropsias hechas a ciervos, ovejas, chivas, vacas y caballos, de intercambios con el Departamento de Patología Animal del INTA Bariloche compilé éstas recomendaciones que les hago llegar a cada uno de ustedes como un aporte para intentar minimizar los efectos negativos de las cenizas volcánicas.
En primer lugar saber que todos los animales ingerirán cenizas si o si, siendo diferente la cantidad de acuerdo a varios factores (cantidad de ceniza caída en cada lugar, largo del pasto, posibilidad de suplementación, etc.).
Los efectos a nivel de dentadura (sobre todo en rumiantes) serán los más importantes a nivel de rodeo general. De acuerdo a la experiencia anterior les reducen entre uno y dos años la vida útil siendo más notables los efectos en animales nuevos (novillitos o vaquillonas de recría y de primera parición).
RECOMENDACIONES:
*En los casos en que sea posible sacar los animales del campo y encerrar, engordar y vender (aunque sea, un poco más livianos).
*Intentar el pastoreo en los cuadros más empastados, donde el pasto esté más largo o luego de regar los potreros para lavar la ceniza de la superficie (difícil en ésta época del año, sobre todo luego de la sequía vivida y de las tucuras). Estas medidas se toman para que la proporción de pasto ingerido sea mayor que la de cenizas.
*Racionar con pasto aunque sea de baja calidad (encerrados o a campo) para que la fibra “arrastre” la ceniza acumulada en sistema digestivo y evitar que se hagan “tapones de ceniza“ por falta de ingesta.
*La ceniza puede dar diarreas, no medicar inmediatamente (suele ser pasajera) si ésta durara más de 3 o 4 días se puede tratar pero NUNCA con medicación que detenga el tránsito intestinal (antiespasmódicos). Intentar siempre con protectores de la mucosa gástrica.
*Ante los problemas oculares por irritación en principio no desesperar, suelen dar lagrimeo que se pasa en cuanto ceden un poco los causales de irritación y aumentan nuevamente con el arrastre de cenizas por el viento. Solamente tratar los animales que luego de la irritación den lugar a infección (se ven lágrimas blancas o peor aún verdes). En éste caso se puede optar por colirio con antibiótico o antibiótico inyectable en los casos más severos.
Los equinos suelen ser los más sensibles a éste problema.